Nosotros

Club de la Unión

Desde su fundación, en 1869, el Club de la Unión, honrando los ideales que motivaron su nacimiento, empezó a ocupar, con creciente dinamismo y brillo singular, un espacio estelar en la vida social de Guayaquil y en el corazón de los guayaquileños.

152 años después de su creación, con orgullo legítimo, mantiene una trayectoria ilustre, forjada en base al esfuerzo, la caballerosidad y la hidalguía de quienes, en todos los actos de su vida, han hecho honor al privilegio de contarse entre sus socios; y, a través de los años ha sido y es, sin duda, el centro de la confraternidad, la tertulia, la amistad, la cultura, los negocios y la vida social de esta ciudad porteña y huancavilca.

Los salones del Club de la Unión han sido testigos de la hospitalidad y la alegría de los guayaquileños; como también lo han sido -en ocasiones menos felices- de la altivez, la energía y el civismo de sus socios, a quienes, casi permanentemente, les ha cabido la responsabilidad y el orgullo de ocupar las más altas dignidades públicas en la ciudad y el país; tanto que un número muy importante de expresidentes constitucionales de la República, se incluye entre los miembros, de antes y de hoy, de esta centenaria y querida institución.

El Club de la Unión es Guayaquil; representa a la cultura de su gente, su hospitalidad, su laboriosidad, su espíritu intenso, franco y progresista. Aquí se siente la verdadera Guayaquil; a la siempre añorada ciudad de antaño; a la moderna urbe del futuro. Nostalgia y esperanza se funden en este Club que es patrimonio insustituible del alma guayaquileña.